La comida es una de las cosas que los turistas pueden disfrutar, además de las atracciones, cuando están en Salvador. Situada en la bahía de Todos los Santos y con una rica cultura influenciada principalmente por los afrobrasileños, la gastronomía de la ciudad es muy variada.
Entre los platos habituales en Salvador están los de marisco y langosta. Te sorprenderá lo baratos que son estos alimentos en la ciudad. De hecho, comparados con los platos de langosta de EE UU y Europa, los precios en Salvador no tienen nada que ver. Para los visitantes que deseen una opción de comida económica y al mismo tiempo vivir una auténtica experiencia gastronómica en la ciudad, los platos de marisco son una excelente elección.
Sin embargo, quienes deseen experimentar con la comida en Salvador quedarán encantados con las numerosas ofertas de la ciudad. Los que se atrevan con la comida picante se enfrentarán a todo un reto con la gastronomía salvadoreña. También se pueden probar platos con nombres extraños, como acarajé, moqueca, vatapá y caruru, entre otros. La mayoría son platos a base de marisco, pero se añaden otros ingredientes para hacerlos más atractivo.
De estos cuatro, el vatapá es el plato estrella entre locales y turistas. Es un guiso de marisco que lleva pimientos verdes, cacahuetes molidos y sus ingredientes clave, dendê (aceite de palma) y leche de coco. El vatapá es conocido por ser un plato de referencia. Tiene diversas variedades, como el caruru, que es vatapá con mucho quingombó, y el acarajé, que es una variedad del plato que lleva pastel de frijol amigo.
La moqueca es otro plato famoso en Salvador. También es a base de marisco, sobre todo de crustáceos y gambas, con dendê, leche de coco y el ingrediente famoso en la ciudad, el pimiento picante. La moqueca se diferencia del vatapá principalmente por la pasta de tomate y las hierbas complementarias, que incluyen perejil, cebolla y ajo.
Estos manjares mencionados pueden no parecer apetecibles a primera vista. Sin embargo, probarlos te dará una perspectiva diferente de estos alimentos, ya que son muy deliciosos, algo que difícilmente probarías en otro lugar del mundo. La mayoría de estos platos se venden en las esquinas de las calles (no te preocupe, ¡los establecimientos son limpios!) y en las orillas de las playas por los típicos bahianos ataviados con vestidos blancos.
Difícilmente olvidarás estos platos de Salvador. Aparte de su extraño nombre, su sabroso sabor es suficiente para que esperes con impaciencia el siguiente plato. Eso sí, hay que tener cuidado con el pimiento, ya que puede ser muy picante.